Una instalación de grandes dimensiones, obra del peruano Ishmael Randall, utiliza el caucho como material y tema: Mil millas deviene metáfora sobre la emigración y la fuerza de las raíces nacionales, y constituye a la vez un mensaje ecologista.
Con llantas recicladas de automóvil, el artista erige una especie de árbol, del cual surgen, como si fueran ramas y raíces, largas tiras de caucho que terminan en monturas o zapatos de ese mismo material.
El artista se refiere así a la fuerza de las raíces nacionales, que mantiene al emigrante “atado” a su país de origen, independientemente de lo lejos que lo hayan llevado sus pasos.
Pero, al mismo tiempo, el artista reflexiona sobre la necesidad del reciclaje de materias primas, en un mundo cada vez más contaminado y saqueado por las grandes corporaciones.
Al escoger el caucho como centro de su obra, Randall quiere llamar la atención sobre la sobreexplotación de los recursos naturales, particularmente en el ámbito de las selvas sudamericanas de donde se extrae ese material.
