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Hilda Vidal, de secretos y otros regresos
20June

Hilda Vidal, de secretos y otros regresos

Por: Modesto Díaz Serpa

La Galería Villa Manuela de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) anuncia su próxima muestra, “¿Sospecharán cuántos secretos hay?” de la artista visual cubana Hilda Vidal,  la cual estará aconteciendo entre los meses de junio y julio del año en curso. La exhibición se inaugurará el próximo 22 de junio a las 6:00 pm en el espacio sede de la galería, cita en calle H, No. 406 entre 17 y 19, del barrio capitalino del Vedado, y se extenderá hasta el día 20 del mes siguiente.

Hilda Vidal pertenece a la generación del setenta, contexto cultural propicio para la formación de artistas de fuerte raigambre pictórica; sector de la plástica que ha defendido hasta la actualidad pese a las disímiles prácticas artísticas en boga que predominan en el panorama del arte contemporáneo dentro y fuera del patio.

En la obra de la artista se advierte una singular añoranza por etapas de esplendor de la pintura moderna. Es por ello que en un gesto de autorreconocimiento con el arte y consigo misma, la artista emplea recursos plásticos procedentes de corrientes artísticas renovadoras en la historia de la pintura, que han dado lugar a un nuevo espacio en el que colisionan intereses éticos y estéticos aparentemente irreconciliables.

En esta, la más reciente muestra de Hilda se consolida un universo simbólico que parte en su formulación técnica de una figuración expresionista. Evoca en su trabajo la influencia de etapas expresionistas picassianas, así como de otras que le sucedieron como el Cubismo, Surrealismo y otras, que condensan en el trabajo de la artista el pleno dominio de un oficio cultivado por más de cuarenta años.

“¿Sospecharán cuantos secretos hay?” se erige cual mapa de sensibilidades agazapadas. Constituye el hombre, por consiguiente, la arquitectura que sostiene cada uno de los acertijos que teje en sus pinturas. Rostros y cuerpos protagonistas del lienzo se muestran en tensiones insuperables por el misterio de un capricho cuasi anestésico. Planos de color audaces, junto a la anatomía geométrica de seres que acechan al paso, se aglutinan en una veintena de lienzos como alegoría de una imaginería de “sueños” perentorios de la artista. Escenasque diseñan sentimientos agudizados y subliman en cada receptor interpelado el secreto de un recuerdo subrepticio.