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Tania González se toma dos espacios de la capital chilena con propuestas donde cruza pintura y taxidermia
09September
Noticias

Tania González se toma dos espacios de la capital chilena con propuestas donde cruza pintura y taxidermia

Luego de haber expuesto durante agosto en Galería Temporal, Tania González ocupa desde el 6 de septiembre otro espacio de la capital chilena: Galería Bech.

 

Ambas exposiciones plantean un solo proyecto donde la joven artista cruza pintura y taxidermia. Figuras centrales de sus instalaciones son aves y liebres muertas.

 

Tania González es pintora y trabaja al mismo tiempo como taxidermista en el Museo Nacional de Historia Natural a través de la empresa CHUCAO. Desde la pintura, su obra ha abordado también el trabajo con lo escultórico, insistiendo en una imagen clave: el cuerpo de aves muertas. Los modelos tienen relación con esa labor paralela, proponiendo además una cita a los bodegones de la pintura flamenca (siglo XVII). Las operaciones apuntan –entre otros motivos– a “sublimar la materia inerte”.

 

Pese a estar muertas, las aves exhiben belleza y vivacidad. Como modelos pictóricos o cuerpos taxidermizados dentro de cajas, protagonizan disposiciones objetuales, bodegones contemporáneos y alegorías al tema de la muerte.

 

Entre agosto y septiembre, la artista ocupa sitios emblemáticos del circuito de arte local. Son dos exposiciones planteadas como un solo proyecto donde Tania González aborda por primera vez la instalación e incluye cuerpos de liebres.

 

 Del 5 al 30 de agosto, “Se levantó en su gloria” fue parte del ciclo de exposiciones “Circuito Temporal” de Galería Temporal que se repartió en vitrinas de centros comerciales de Santiago. Cuarenta mirlos suspendidos a distintas alturas fue un montaje de representaciones  escultóricas idénticas y de gran realismo, donde sólo dos correspondían a aves taxidermizadas. Escribió la poeta y académica Eugenia Brito: “El carácter mortuorio de esta obra debe su efecto a que el mirlo es una metáfora del ser humano y su capacidad de vuelo”.

 

 Del 6 de septiembre al 3 de octubre en Galería BECH (Alameda 123), “Tres pies de profundidad” reúne pinturas y cajas de distintos tamaños y alturas. Más que detenerse en la pura representación, la artista suma aquí un interés en ocupar el espacio, jugando a que las obras se acumulen y eleven dentro de la sala. Diez piezas en total, incluyen pinturas y cajas-vitrinas de metal, óleo y taxidermia de especies como pájaros y liebres, piezas realizadas por la autora y donadas por el taxidermista Miguel de la Fuente.

 

Fuente: Nota de prensa