Pasar al contenido principal
Gigantesco coro interpretará a Mozart
04March
Noticias

Gigantesco coro interpretará a Mozart

Como casi todos los años cuando se aproxima la Semana Santa, llega el Réquiem de Mozart, una de sus obras más enigmáticas y, sin duda, una de las más escuchadas y aplaudidas. En este caso la oportunidad la brinda la Orquesta y el Coro Filarmonía junto con 400 coristas participativos, dirigidos todos por Pascual Osa, en la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional de Música de Madrid, el jueves 5 de marzo a las 19:30.

 

Los solistas serán: Ana Fernández (soprano), Mayte Maruri (mezzo), Francisco Javier Alonso (tenor) y Luis Santana (barítono). En la primera parte del concierto Enrique Pérez Piquer, solista de clarinete de la Orquesta Nacional de España, interpretará junto a la Orquesta Filarmonía, otra de las obras maestras del compositor, el Concierto para Clarinete y Orquesta en La Mayor K622. Este magno concierto tiene la ventaja añadida de ofrecerse con precios que van desde 18 hasta 34 euros.

 

A lo largo de su corta vida (murió con 35 años), Wolfgang Amadeus Mozart realizó más de seiscientas creaciones de todos los géneros musicales, en su mayoría reconocidas como obras maestras de la música sinfónica, concertante, de cámara, para piano, operística y coral, logrando una popularidad y difusión universales. De todas ellas, la célebre Misa de Réquiem en re menor KV 626, más conocida simplemente como Réquiem, una de las 19 misas escritas por Mozart quien murió antes de terminarla en 1791 dejándola inconclusa, es una de sus obras más representativas. Tal vez por eso y porque muchos consideran que en realidad Mozart la creó pensando en su propia muerte, es la más conocida y la más interpretada. La tensión emocional, la belleza melancólica de los temas, especialmente el motivo inicial del primer  movimiento, y la claridad orquestal de la 'Sinfonía 40' se subrayan en esta delicada y transparente obra del autor austriaco.

 

Pocas obras están tan pegadas a la leyenda como ésta. La forma en la que se gestó y el no haberse terminado alimentan el misterio que envuelve la última de las composiciones del genio de Salzburgo. La composición de la Misa Réquiem de Mozart está rodeada de una oscura fantasía que narra una extraña visita al compositor de un misterioso y tétrico desconocido para pedir el encargo para una Misa de Réquiem, en el verano de 1791; el nombre del destinatario no podía ser revelado.

 

Mozart, obsesionado con la idea de la muerte desde la de su padre, debilitado por la fatiga y la enfermedad, muy sensible a lo sobrenatural por su vinculación con la francmasonería e impresionado por el aspecto del enviado, terminó por creer que éste era un mensajero del Destino y que el Réquiem que iba a componer sería para su propio funeral atormentando sus últimos días de vida.

 

Este Réquiem es la obra sacra más interpretada y mitificada de la historia. Compuesto en una época en la que el Réquiem seguía siendo una obra para representar en la Iglesia, y no en la ópera, por entonces considerada pagana, las características operísticas de la obra de Mozart resultan de lo más provocadoras. Afortunadamente, los tiempos han cambiado y el Réquiem no despierta ningún recelo, hasta el anterior Papa Benedicto XVI se mostró fan de Mózart: "En Mozart cada cosa está en perfecta armonía, cada nota, cada frase musical y no podría ser de otra manera; incluso los opuestos se han reconciliado y 'la serenidad mozartiana' lo envuelve todo, en cada momento. Es un don éste de la gracia de Dios, pero también es el fruto de la viva fe de Mozart, que, sobre todo en la música sacra, logra transpirar la luminosa respuesta del amor divino, que da esperanza, incluso cuando la vida humana está lacerada por el sufrimiento y la muerte".

 

El Réquiem es el tercer gran concierto de Filarmonía en esta temporada, después de su Gran Gala de Zarzuela en octubre pasado y La Guerra de las Galaxias en concierto en diciembre. El último concierto de la temporada será Turandot, "Ópera en el Auditorio" el 30 de abril.

 

SOBRE FILARMONíA. Se trata de una organización reconocida en todo el territorio nacional, por su gran estabilidad y capacidad de organización de proyectos de gran calidad en el campo de la música clásica en directo, en concreto conciertos y representaciones de ópera y zarzuela, para todo tipo de públicos. La Orquesta Filarmonía nació en el año 2000 y durante sus años de vida se ha consolidado como referencia en las principales salas de música clásica de España.

 

Desde mayo de 2012, el Coro y la Orquesta Filarmonía tienen su sede en el Centro Cultural Eduardo Úrculo de Madrid.