Arte, arquitectura y música conquistan El Ampurdán

Tres galerías - Bombon, Joan Prats y Nogueras Blanchard - se han empeñado en llenar de arte contemporáneo la región catalana del Bajo Ampurdán, y es que el arte también puede florecer fuera de los espacios habituales. Por tercer año consecutivo, las tres galerías barcelonesas – la galería Nogueras Blanchard posee una sede en Madrid y otra en Barcelona – cambian el incesante ritmo de ciudades como Miami, Basilea o Londres por un escenario idílico a menos de 100 kilómetros de sus respectivas sedes.

Será, concretamente, en un edificio industrial: una antigua fábrica de harina ubicada en el pueblo medieval de Corçà, donde las galerías reúnen hasta el 27 de agosto a 11 artistas que trabajan diferentes lenguajes, gestos o soportes. Una muestra en la que participan Alfons Borrell, Ludovica Carbotta, Juliana Cerqueira Leite, Joana Escoval, Lara Fluxà, Joan Hernández Pijuan, Joan Miró, Ester Partegàs, Josep Ponsatí, José María Sicilia o Tadáskía, entre otros, en lo que es un diálogo entre todos ellos acerca del movimiento y el espacio.

Desde que esta iniciativa comenzara, reunir propuestas atrevidas en espacios en los que la arquitectura y el entorno tuviesen un papel relevante ha sido una prioridad para las tres galerías. En esta ocasión, un edificio de 500 metros cuadrados repartidos en ocho salas, que en tiempos pretéritos cumplía la función de edificio de defensa, y más cercano a nuestros días se desempeñó como una fábrica de harinas – hasta los años 30 del siglo pasado –, se convierte en galería de arte improvisada.

“Este proyecto es una manera mucho más tranquila de mantener un diálogo real con el espectador, salir del sistema establecido y reconectar con el visitante. El objetivo es propiciar un encuentro físico y emocional con el arte en un entorno natural y con un ambiente relajado”, expresa Rebeca Blanchard, galerista de Nogueras Blanchard.

La exposición, bautizada como Meridiano espíritu fantástico, busca contagiar al espectador referenciando el mecanismo del propio molino, pero de manera más espiritual. “Queremos que el visitante se deje llevar por la corriente del agua. Cada uno llegará a un punto distinto de la orilla”, cuenta Patricia de Muga, directora de la Galería Joan Prats.

“A veces, es difícil encontrar un maestro como Miró junto a alguien mucho más joven, una artista emergente como Tadáskía o una de media carrera como Ester Partegàs, Juliana Cerqueira Leite, Joana Escoval o Lara Fluxá. Ese diálogo, a veces imposible, lo encontramos aquí”, explica de Muga en referencia a la propuesta artística.

Pero el lenguaje también tiene una función relevante en esta exposición, ya que la producción del texto de sala ha sido encargada a la poeta Ángela Segovia. “Como han dicho los críticos, sus poesías no solo desbordan el papel sino el lenguaje y la estructura preceptiva del poema, poniendo en tensión constante el lenguaje normativo”, recalca Joana Roda, directora de Bombon.

Música y otras disciplinas artísticas completan la propuesta

Así como la poesía, la música, la arquitectura, la fotografía o el diseño completan el verano artístico en el Bajo Ampurdán. Son varias las actividades que se han organizado de forma paralela a la exposición, como la presentación del último trabajo del artista Oliver Frank Chanarin – el libro titulado A Perfect Sentence – quien, a través de sus fotografías, intenta reconciliar la excentricidad de lo británico con la necesidad apremiante de nuevas formas de representación.

Por su parte, el violonchelista Oriol Prat ofrecerá el próximo 12 de agosto un concierto en el que interpretará una banda sonora con obras de J.S. Bach, Luciano Berio y Zoltán Kodály.