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Mónica Dower en Ginocchio Galería
30March
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Mónica Dower en Ginocchio Galería

Ciudad de México: Pintando la imagen en movimiento se titula la muestra que inaugura este jueves (31 de marzo), la artista Mónica Dower en Ginocchio Galería, en la Colonia Polanco, como parte de la feria ZsonaMACO.

 

Se trata de una serie de obras inspiradas en secuencias de cine y video donde, más que la trama, la artista potencia el cruce genérico y saca partido a las posibilidades que le ofrece uno de sus recursos creativos: la distorsión de la imagen.

 

Mónica Dower nació en 1966 en Southampton, Inglaterra, y estudió en la Escuela Nacional de Artes Plásticas, de la Universidad Nacional Autónoma de México. En La Sorbona, París estudió Historia del arte y asistió al taller de acuarela y arte oriental de Luis Ansa. En 1995 ganó la beca del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes de Jóvenes Creadores. Ha realizado doce exposiciones individuales, en las cuales sobresalen Les imaginaires, en París, y La vie en rose, en la Galería Nina Menocal.

 

Acerca de esta muestra (vigente hasta el 30 de abril) ha comentado la artista: “En la serie Pintando la imagen en movimiento, convierto secuencias de video y de cine en pintura. De un vasto universo de imágenes, congelo las que me interesan y las reproduzco a mi manera, utilizando acuarelas sobre papel y acrílicos sobre tela. En estas pinturas aparezco yo como espectadora, o bien, otros públicos imaginarios que funcionan para distinguir las dos dimensiones que siempre aparecen yuxtapuestas en mis cuadros: la de los videos pintados y la de los modelos reales. Las imágenes en movimiento son recreadas a mi manera; en ningún momento busco la copia exacta; me centro más en las diversas sensaciones que me producen y de hecho a veces aunque sea de forma breve me interesa alterar su estabilidad por medio de cambios de colores que puedo acentuar o de líneas que interfieren y distorsionan o alargan parcialmente las imágenes. Mi pintura relativiza así la ‘estabilidad’, los ‘bordes’ y la ‘definición’ de las imágenes. Así, considerando que la traducción de una imagen tecnológica a una imagen pictórica es ya una distorsión, puede afirmarse que manejo diversos grados de distorsión, según el diálogo que sostenga con cada imagen (con cada modelo). Este margen de ‘distorsión’ es el que genera la posibilidad de creación”.