El jazz es el lenguaje del alma. Hoy celebramos su legado y su futuro.

El 30 de abril se celebra el Día Internacional del Jazz, una fecha proclamada por la UNESCO en 2011 para destacar el poder del jazz como herramienta de unión, diálogo y expresión cultural. Este género musical, nacido a finales del siglo XIX en los Estados Unidos, es mucho más que una forma de arte: es un símbolo de libertad, creatividad y diversidad.

El jazz tiene sus raíces en las tradiciones africanas y afroamericanas, fusionando ritmos, melodías e improvisación para crear un lenguaje universal que trasciende fronteras. Desde las calles de Nueva Orleans hasta los escenarios más prestigiosos del mundo, el jazz ha influido en otros géneros musicales y ha sido un reflejo de luchas sociales, como la defensa de los derechos civiles y la igualdad.

Este día no solo celebra la música, sino también los valores que representa: la inclusión, el respeto y la colaboración entre culturas. En un mundo donde las diferencias a menudo nos dividen, el jazz nos recuerda que la diversidad es una fuente de riqueza y que, a través del arte, podemos construir puentes de entendimiento.

En el Día Internacional del Jazz, se organizan conciertos, talleres y actividades en todo el mundo para honrar a los grandes maestros del género, como Louis Armstrong, Miles Davis, Ella Fitzgerald y John Coltrane, y para inspirar a las nuevas generaciones a explorar este arte lleno de alma y pasión.