La galería Contrast de Barcelona presenta la exposición del artista pluridisciplinar Fantastic Man, pseudónimo de Sergio López (León, México. 1971), que reside desde hace cinco años en Madrid. Esta es la primera ocasión que muestra su obra en la capital catalana. Lo hace a través de U are, un trabajo que une instalación, arte sonoro, audiovisual e intervención artística. Todo ello se muestra través de cinco espacios, con una propuesta diferente, que sirve para adentrarse en el terreno conceptual, donde el espectador se sumerge en un mundo casi sobrenatural.
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El artista mexicano reflexiona sobre diversos aspectos que recientemente nos han preocupado, caso de la pandemia que nos ha obligado durante un largo periodo de tiempo a permanecer en casa y salir sólo cuando era necesario. Por ello, esta exposición es una especie de “viaje sensorial” ya que el confinamiento ha originado que hayamos “consumido todo tipo de imágenes e informaciones sin ningún tipo de filtro, sin necesidad de decidir nada ni, tan solo de pensar, un estado que considera parecido a la muerte”.
Fantastic Man se licenció en Marketing, por lo que su primera actividad profesional estaba ligada al mundo de la publicidad. Más adelante entra en contacto con otro artista mexicano, concretamente Sergio Bustamente, con el que colabora en un proyecto de lanzamiento de una línea de bolsas. Posteriormente ocupa otro cargo responsabilizándose de las joyas, tema éste que le servirá para conocer de cerca el mundo de los metales.
En 2010 muestra su primera colección junto con el diseñador Daniel Andrade. Pero no será hasta su traslado a Madrid cuando se interesará por el mundo del arte. El año pasado exhibió en el espacio Monbull Corner de la capital española sus primeras piezas a modo de instalación. En el presente año mostró algunas obras en la Feria Estampa, gracias al proyecto Casa de Indias.
En cuando a la galería Contrast, esta se fundó en 1992, poco después de la celebración de las Olimpiadas, bajo la dirección de Antonia Boixadós. Desde hace diez años su director artístico es Víctor Castañeda que, junto con Sandra Segura, dirigen actualmente la galería. Contrast participa en ferias nacionales e internacionales, realiza exposiciones tanto individuales como colectivas, así como presentaciones, encuentros, performances, conferencias, etc.
Respecto a las obras que se pueden contemplar en la galería Contrast, encontramos esculturas en papel, algebrijes, máscaras, vídeos y una performance. En primer lugar, se expone un pequeño robot de color verde que lleva una cámara incorporada unida a una pantalla que “lee” el pensamiento del espectador que se coloca delante de ella, dándole su aprobación para que pueda visitar la exposición. Luego en una pantalla aparecen diversas imágenes en las que se ve a un personaje que se va transformando a gran velocidad en otro de indescifrable, a modo de metamorfosis.
En la siguiente sala se exhiben unas máscaras de colores muy vivos y luminosos situadas en unas vitrinas de metacrilato, todas ellas construidas en papel maché barnizado, representando diversos personajes populares procedentes del mundo animal: cerdo, gato, conejo y ciervo. En otro ámbito se exponen unos enormes escarabajos de diferentes colores (amarillo, rojo y verde) que parecen flotar en el espacio o bien sumergidos en un líquido transparente.
Hay una escultura de un personaje fantasmagórico a tamaño natural que está construida en papel perforado donde aparecen emoticones que no se aprecian a simple vista. El sonido y los cambios de color acompañan a esta figura procedente del imaginario popular. También procedentes de México hay una serie de pequeñas figuras denominadas algebrijes, creadas por el artista Pedro Linares, partiendo de “un sueño delirante para dar vida a sus criaturas fantásticas”. Son animales extraños: gallos con cuernos de buey, leones con cabeza de perro y asnos con alas, entre otros.
Finalmente, la bailarina de danza contemporánea, la joven almeriense Gádor Lago, a modo de performance efectúa delante del público unos movimientos rápidos y constantes en los que se aprecia su destreza en un espacio tan reducido. Es como si su cuerpo se fusionara con una araña y quisiera poseernos. Esta performance encaja perfectamente con el planteamiento de Fantastic Man, ya que combina a la vez tecnología, tradición, música, contemporaneidad, danza y escultura.
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