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Entre libros el Castillo de San Carlos de la Cabaña
11February

Entre libros el Castillo de San Carlos de la Cabaña

Construida para defender a La Habana del ataque de corsarios y piratas, junto a la fortaleza de San Salvador de La Punta y el Castillo de la Real Fuerza de La Habana, el Castillo de San Carlos de la Cabaña, la más grande edificación militar construida por España en América, se colma por estos días de mayor alegría, como sede permanente de la Feria Internacional del Libro de La Habana que hasta el 22 de febrero acoge esta obra monumental, llamada así en honor al rey español Carlos tercero.
 
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Devenido complejo cultural y museístico, desde donde todavía hoy se realiza la llamada ceremonia del Cañonazo a la usanza del siglo XVIII y se realiza cada día el tradicional disparo de mortero de las 9 de las noche, ritual simbólico semejante al que antiguamente anunciaba el cierre de las murallas de la ciudad y en el que se destacan los soldados vestidos con atuendos de la época, que por muchas razones constituye una de las más gustadas atracciones que ofrece este recinto a sus nocturnos visitantes.
 
Esa ribera alta del Puerto de La Habana era una zona indefensa y ello fue aprovechado por las tropas inglesas en 1762 para atacar El Morro y más tarde rendir a La Habana.
 
Estudiosos afirman que ya antes del suceso, el ingeniero Juan Bautista Antonelli, constructor de El Morro había advertido a las autoridades de la isla sobre el valor estratégico del cerro de la Cabaña.
 
Tras el ataque de los ingleses, el rey Carlos III ordenó la inmediata fortificación de esa ribera, labor que se le encomendó al ingeniero militar Silvestre Abarca y que fue terminada en 1774 y donde se conjugaron los mayores avances de la ingeniería militar del siglo XVIII.
 
Cruzando el túnel de la Bahía habanera usted podrá llegar al lugar, aunque si lo prefiere también puede hacerlo por la llamada lanchita de Casa Blanca, subir al Cristo de la Habana y luego andar casi medio kilómetro hasta llegar al lugar por la parte de tierra firme; castillo que es rodeado por esa parte por un colosal foso con dos lunetos y dos tenazas. Por la parte del puerto hay una maciza escarpa y casi al nivel del agua, muy cerca del extremo oeste de la fortaleza, se conserva la batería de la Divina Pastora, anterior a la construcción de La Cabaña.
 
Esa fortaleza habanera ostenta en su entrada un vano en arco, tapiado a partir de su arranque, y enmarcado por columnas adosadas que sostienen un entablamento decorado con mascarones. El cuerpo principal del enorme fortín, compuesto por dos semibaluartes extremos, el de San Francisco y el San Lorenzo, además de un baluarte central, llamado San Ambrosio, unidos todos por cortinas hacia tierra.
 
En el interior, de escala monumental, la Plaza de Armas y los cuarteles, con rampas y calles de circulación para las tropas. En un extremo del cuartel occidental está ubicada la capilla, de elegante portada, que contrasta con los muros desnudos del conjunto.
 
La posición estratégica de la fortaleza, enlazada con el fuerte del Morro, y las diez hectáreas que ocupaba con más de 700 metros de muralla, la convirtieron en la mayor de la isla y América.
 
Al triunfo de la Revolución, la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña en La Habana, sirvió de comandancia a Ernesto Guevara.
 
Años más tarde, en 1986, se realizaron trabajos de restauración de la fortificación, en labor coordinada entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana para crear el Parque Histórico Militar Morro Cabaña.
 
En 1992, terminada la restauración, se abrieron el Museo de Armas, el Museo de la Comandancia del Che, y un Museo Monográfico, que describe la historia de la fortaleza.
 
Desde entonces, sus espacios han acogido eventos culturales tales como la Bienal de Artes Plásticas de La Habana y la Feria Internacional del Libro de La Habana.
 
En esta 25 edición la feria es dedicada a Uruguay y para la ocasión realizará una visita oficial a Cuba el vicepresidente uruguayo, Raúl Sendic, acompañado de los ministros de Economía Danilo Astori y de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, entre otras personalidades invitadas a la cita literaria.
 
El pabellón "Eduardo Galeano", de la Fortaleza San Carlos de La Cabaña, será el lugar para apreciar una muestra de la literatura y el arte uruguayo representados en 31 textos de autores la nación suramericana.
 
De igual modo la Feria del Libro, que dedica su vigésimo quinta edición a los escritores Lina de Feria Barrios y Rogelio Martínez Furé, y reunirá en los días de celebraciones a expositores de 37 naciones de todas las regiones del mundo entre editores, escritores, distribuidores y artistas.
 
Además de su sede principal a La Cabaña, recinto militar convertido en museo, la fiesta literaria tendrá varias subsedes en la capital hasta el 21 de febrero, luego extenderse gradualmente por el resto de las provincias del país hasta el 24 abril que concluirá en Santiago de Cuba.
 
La Empresa de distribución del Libro entregará más de 600 títulos a comercializar en las diferentes sedes que incluye también el Pabellón Cuba, la Universidad de la Habana, el Centro Dulce María Loynaz, entre otras que servirán de subsedes de la cita literaria.
 
Entre libros está el Castillo de San Carlos de la Cabaña, razones nuevas para que en estos días se multipliquen por miles el número de visitantes.