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Daniel Barenboim pone el cartel de “no hay localidades” en el Auditorio Nacional
26November
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Daniel Barenboim pone el cartel de “no hay localidades” en el Auditorio Nacional

Ni una de las 2.324 butacas de la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional de Música de Madrid está disponible desde hace semanas para el recital que dará el próximo domingo 27 de noviembre a las 19:30 el irrepetible Daniel Barenboim de la mano de Ibermúsica. Un éxito parecido al de los días precedentes en Zaragoza y Barcelona (miércoles y jueves, respectivamente). Interpretará a Schubert, Chopin y Liszt, compositores de temperamento, dramatismo y discordancias. Pero capaces de convertir el enfrentamiento de sus sonidos en algo bello...

 


Una de las novedades de esta nueva gira en España es el “estreno” de su nuevo piano que ha sido construido a medida. Barenboim ha reconocido que empezó a soñar con su nuevo instrumento tras quedar fascinado con el piano antiguo de Liszt hace cinco años en la localidad italiana de Siena. “Vi que las cuerdas estaban dispuestas en paralelo, mientras que desde 1875, cuando más o menos se empiezan a fabricar los pianos de hoy en día, la disposición interna de las mismas está en diagonal. Pensé que si con los materiales con los que se construyen ahora los instrumentos se pudieran reordenar por dentro, el sonido cambiaría”. Su nuevo piano, diseñado por él mismo junto al fabricante belga Chris Maene, combina las ventajas técnicas modernas con la peculiaridad de tener las cuerdas paralelas del modelo de Liszt, en lugar de diagonales, lo que genera un sonido más transparente y claro. Con este instrumento, del que tiene dos versiones, publicó este mes su nuevo álbum, "On my new piano" (Deutsche Grammophon), y es el que utiliza en su gira española.

 


Sobre Barenboim está casi todo dicho, aunque cada pocos días da lugar a que se digan más cosas. ¿Cómo se podría definir a Daniel Barenboim? ¿Un gigante incansable, un Hércules de la música? ¿O un fenómeno único?. Así lo calificó el veterano director de orquesta Wilhelm Furtwängler cuando el pianista tenía sólo 11 años. En todo caso, se trata de uno de los grandes intérpretes de los siglos XX y XXI, un artista que a su trabajo ha incorporado también un credo ético e intelectual insobornable. Es un inmenso placer reencontrarnos con esta figura legendaria de la música de nuestro tiempo. Un recital que sin duda nos hará pensar, con Barenboim, que la música tiene un significado que no se puede expresar con palabras.

 


Según ha declarado a diversos medios, aún no sabe si se quedará con el nuevo piano toda la vida. “Estoy probando”, comenta cauteloso. Pero se le ve contento. Por su nuevo juguete, pero también por haber hecho caso a sus dos hijos, que le recriminaban el hecho de que dirigiera más y hubiese abandonado un tanto el piano. “Les escucho mucho, uno es violinista y el otro hace música electrónica, también me convencieron para que me metiera a crear mi canal de YouTube y trasladar a los más jóvenes aspectos de la música clásica que no entienden bien. Tenían razón”.

 


No es la primera vez que el pianista pone en marcha un proyecto divulgativo como este. En 1999 creó el West-Eastern Divan junto con el intelectual israelí Edward Said, que tuvo su sede en Andalucía durante años. Se trataba de un taller para jóvenes músicos de países de Oriente Medio e Israel donde se pretendía combinar el desarrollo musical y el acercamiento entre ambas culturas históricamente rivales.

 


Entre sus últimas aportaciones está su apuesta por la cultura digital y la apertura de su primer canal de YouTube. En efecto, en agosto pasado Daniel Barenboim ha abierto un canal con el que pretende acercar la cultura musical a los jóvenes a través de uno de los formatos que mejor manejan: el audiovisual. Mediante esta iniciativa, el músico argentino –también nacionalizado español, israelí y palestino– quiere transmitir su pasión por la música y los temas que más le conmueven. En este canal va a desarrollar y producir formatos de vídeo propios. Su intención es explicar los conceptos musicales más importantes de sus obras. Además dentro del canal de Youtube habrá un espacio llamado Barenboim explora, en el que, como ya hace en su web, comentará acontecimientos políticos culturales y sociales de actualidad, solo que aquí lo hará en vídeo. También subirá vídeos de conversaciones con personajes relevantes del mundo de la política, el deporte, el arte y la arquitectura. No serán entrevistas, sino charlas distendidas, en las que cada uno de los protagonistas dará su impresión sobre temas relacionados con su profesión.

 


Ibermúsica no olvida el piano en los siguientes conciertos. En los que tendrán lugar los días 9 y 10 de diciembre con la London Philharmonic, dirigida por Vladimir Jurowski, incluirá, en el del día 10 al joven genio Jan Lisiecki que con solo 19 años interpretará la obra cumbre de Federico Chopin, el Concierto para piano núm. 1 en Mi menor, op. 11. Un estupendo aperitivo para introducirnos en los conciertos extraordinarios de Navidad.

 


Ibermúsica lleva 45 años trayendo lo mejor de la música a España y espera seguirlo haciendo, liderado por su fundador, Alfonso Aijón. Quienes estén interesados en adquirir localidades, aún hay disponibles en: www.entradasinaem.es; tel.: 902 22 49 49 o directamente en las taquillas del Auditorio Nacional de Música.