Pasar al contenido principal

Como parte de la edición cuarenta del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano fueron presentados en el Centro Cultural Cinematográfico Fresa y Chocolate el número 203-204 de la revista Cine Cubano y cuatro libros del sello Ediciones Icaic: De cierta manera (Colección Guion Cubano), de Arturo Arango y Víctor Fowler (coordinadores); El cine latinoamericano del desencanto, de Justo Planas; Confluencias de los sentidos. Diseño sonoro en el cine cubano de ficción, de Dailey Fernández; y Miedo en el cine, de Enrique Pérez Díaz. Y nadie mejor para conducir la velada que la directora de dicha editorial: Mercy Ruiz.

De Cine Cubano 203-204 dijo el escritor, ensayista y cineasta Raydel Araoz: «Con este número abarcador, que va desde el cine clásico cubano hasta los más jóvenes cineastas, junto con un panorama del cine contemporáneo internacional se logra actualizar al lector de cómo se piensa el cine hoy y cómo se relee su historia. Quizás por eso, en su portada, un rostro de Botticelli intervenido con un lente pone la mira hacia afuera de la revista. Quiero creer que esa mujer no mira hacia el lector, sino a la sociedad, que queda retratada en su multiplicidad de enfoques».

Explicó Mercy que la Colección Guion ha tenido mucho éxito entre los lectores, a pesar de su pequeña tirada de mil ejemplares. De cierta manera es el tercer volumen de dicha entrega editorial. «Después de poner en marcha la colección —explicó Arturo Arango—, que comenzó con Juan Quin Quín y continuó con Memorias del subdesarrollo, cuyo guion original se llamaba Páginas de un diario, Víctor Fowler encontró el de la película que terminó llamándose De cierta manera, y que en un principio se tituló Residencial Miraflores, escrito por Sara Gómez y Tomás González. Víctor no solo lo encontró, sino que hizo un estudio prolijo, exhaustivo, acucioso del traslado del guion al soporte fílmico, de las variaciones y de los sentidos de esas variaciones, y a partir de ahí fue que se construyó este volumen, con una serie de textos complementarios».

El libro del candidato a doctor en Cultura Latinoamericana e Ibérica de la Universidad de Nueva York Justo Planas «hace un análisis del cine latinoamericano desde una mirada bien novedosa». Tiene «la capacidad de construir una sólida tesis interpretativa a propósito de uno de los autores más enigmáticos y polémicos del cine latinoamericano contemporáneo: el mexicano Carlos Reigadas».

Confluencias de los sentidos. Diseño sonoro en el cine cubano de ficción, de Dailey Fernández, es un libro que parte de la tesis de grado de su autora y es el primero que se publica en nuestro país sobre una de las tantas especialidades que intervienen en la consecución del hecho cinematográfico. «Constituye —apuntó Mercy Ruiz— un homenaje a esas personas que hacen cine desde posiciones detrás de la pantalla; no son actores, actrices, directores, fotógrafas, músicos… El diseño sonoro en el cine es una de estas especialidades que no se ven, pero que son imprescindibles para hacer cualquier película».

Por último, la joven escritora cubana Elaine Vilar Madruga tuvo a su cargo la presentación de Miedo en el cine, de Enrique Pérez Díaz, uno de los más encumbrados autores de literatura infantil y juvenil con que cuenta Cuba, quien tuvo el honor en el año 2014 de integrar el jurado del prestigioso Premio Hans Christian Andersen. «En el mundo actual y cambiante —concluyó Elaine—, donde la sombra del apocalipsis nuclear y social hace que los terrores de lo sobrenatural se pasen casi por alto, un libro como este no solo hace homenaje al cine, sino a un género que ha tenido defensores y detractores por igual».

Le puede interesar: 

La omisión: un filme para redescubrir Argentina

Yuli alias Acosta

Marilyn: flashbacks de una historia real