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El “fotógrafo de las estrellas”
17March

El “fotógrafo de las estrellas”

Por Ricardo Potts

 

El pasado jueves 15 de marzo tuvo lugar en el Espacio Cultural Excelencias de Madrid la inauguración de la expo Hollywood en Madrid, con más de 40 instantáneas del español Vicente Ibáñez. Durante el evento tuve la oportunidad de conversar con su hijo, también fotógrafo, quien me revelara algunas claves de la carrera de este singular artista.

 

¿Cuándo y de qué manera comenzó la carrera de tu padre?

 

En 1951 inauguró el estudio de fotografía, aunque empezó unos años antes, en el estudio de la Calle de la Montera, que pertenecía a mi abuelo, donde trabajó junto a sus hermanos Paco y Juan. Los tres dieron allí sus primeros pasos en el medio, siguiendo la tradición familiar. Luego cada hermano decidió trabajar en su propio estilo, y consecuentemente se separaron para fundar sus locales: Mi tío Paco en Atocha, mi tío Juan se mantuvo en el estudio de mi abuelo cuando falleció; y mi padre abrió el suyo en la Gran Vía.

 

¿En el año 51 comienza con la fotografía de las estrellas?

 

Correcto. Claro, en un inicio las cosas fueron un poco difíciles para él. Siempre comentaba que durante el primer mes que estuvo el estudio de inaugurado no subía nadie. Con miedo a un fiasco económico, y lleno de energías, decidió visitar varios lugares de moda en la ciudad, mostrar su trabajo, entregar su tarjeta en los diferentes ambientes de fiesta como Pasapoga Music Hall, Florida Park... Se promocionó el mismo. Ofreció incluso realizar fotografías sin coste para que la gente supiera cómo era su trabajo. Estuvo en varias salas de espectáculo hasta que se dio a conocer, y luego lógicamente la gente venía a él.

 

Era la época de “las flamencas”: Lola Flores, Carmen Sevilla, Rocío Jurado. Luego hubo una etapa en la que retrató artistas de Hollywood, que o bien venían a España o él viajaba a retratarles, Romy Schneider, por ejemplo.

 

¿Cuándo alcanzó entonces con su lente a las grandes estrellas internacionales? ¿Apreciaba especialmente a alguna?

 

Calculo que aproximadamente entre 1955 y 1965. Era la época de Tyrone Power, a quien realizo el último reportaje fotográfico –antes de su inesperada muerte– por el casco antiguo de Madrid.

 

El sentía predilección por las flamencas, las “folclóricas”, como también les llamaba. También le impactó mucho su contacto con Ava Gardner, puede decirse incluso que ella era su debilidad. Cuando Ava visitó el estudio de mi padre venía realmente con una amiga que era la que iba a retratarse. Él la abordó y le pidió que posara. Aunque ella en un inicio se negó, diciendo que no venía con un aspecto como para fotografías, luego cedió ante la insistencia del artista, que le propuso usar un pañuelo negro para tapare el cabello. En realidad quería retratar su rostro, y lo consiguió de manera genial.

 

En esta muestra hemos tenido la oportunidad de acceder a imágenes poco conocidas, impactantes por su intimismo, de estrellas como Buster Keaton, Kirk Douglas, Deborah Kerr. Tu padre logró una serie de fotos que muchos de sus colegas no pudieron conseguir, que van más a la esencia del individuo. ¿Cuál era su estilo fotográfico preferido?

 

Era un retratista. Y los artistas eran para él su vida. Aunque también retrató a mucha gente anónima, en cientos de eventos sociales como bodas, comuniones.

 

Creo que su época dorada fue en los sesenta-setenta, de hecho muchos recortes de prensa lo mencionan en titulares como Vicente Ibáñez, el fotógrafo de las estrellas. Estaba realmente de moda.

 

En sus imágenes había siempre una mezcla de lo construido (las poses y la escenografía) con lo espontáneo, aunque siempre se interesó mucho por la improvisación. Y cuando recurría a las poses buscaba naturalidad, no las estrategias típicas, más “encartonadas”.

 

Como fotógrafo que ha transitado entre el rollo 35 mm y la era digital, ¿qué te parece que se ha perdido, por una parte, y qué se ha ganado?

 

Se ha ganado en rapidez y funcionalidad. Pero se ha perdido un verdadero trabajo en el “arte fotográfico”, al menos para mi gusto. El encanto que tenía ese blanco y negro, o ese color sin trucajes, sin montajes, sin retoques. Hoy en día la mayor parte de la fotografía no es “natural”, y cualquiera puede ser potencialmente un fotógrafo.

 

Por último, ¿qué te parece esta exhibición que el Espacio Cultural Excelencias ha dedicado a la obra de tu padre?

 

Me siento muy emocionado. Poder ver su obra exhibida en una galería, que la gente pueda admirar la fotografía de la época.

 

Hollywood en Madrid estará abierta al público hasta el próximo 15 de abril. Para más información contáctenos a través del email arte@excelencias.com.