El festival aragonés cerraba la semana pasada su primera edición pospandemia, y los datos de asistencia no podrían ser mejores: casi 45.000 espectadores y cuatro soldouts, lo que supone duplicar los datos de asistencia de 2019. Según datos del propio festival, por el Valle del Tena ha pasado público proveniente de hasta 26 países distintos, y esta importante presencia de amantes de la música y la naturaleza por el festival supone un impacto de más de 7 millones de euros en la zona.
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La presente edición, que se ha celebrado del 15 de julio al 6 de agosto, reunía a más de 30 artistas de todo el mundo, y el fantástico cartel que presentaba Pirineos Sur se ha traducido en hasta cuatro carteles de ‘no hay entradas’, concretamente en los conciertos de Estopa, Rozalén, Crystal Fighters y Residente.
Germán Quimasó, director artístico de Pirineos Sur y gerente de Sonde 3, la nueva promotora gestora, explicaba así el éxito de esta edición: “Esta 29 edición de Pirineos Sur, y primera para nosotros como dirección del festival, no podía haber sido mejor. Nos marcamos dos objetivos claros: rejuvenecer la audiencia y aumentar el número de asistentes de años anteriores; y una vez acabado el festival podemos decir que los objetivos se han cumplido. Además, estamos muy contentos con cómo se han desarrollado las jornadas de conciertos, tanto público como artistas han disfrutado del festival consiguiendo una comunión como en pocos festivales se puede vivir”.
Y es que los datos que se manejan desde el festival reflejan el éxito y el impacto de Pirineos Sur en la región. Según estos, cada visitante de Pirineos Sur ha gastado de media por día 160 euros, sumando un total de 7,2 millones de euros de impacto en la zona, concentrándose especialmente en alojamiento, restauración y actividades deportivas. Además, como ya hemos señalado, el festival acoge público de todo el mundo: más del 80% del público ha venido de fuera de Huesca, y más del 50% fuera de Aragón, concretamente desde 26 países distintos y de todas las provincias españolas.
Sobre esto, explicaba Jesús Pellejero, de la asociación turística Valle de Tena, que “Pirineo Sur ha vuelto con mucha fuerza y con gran acogida por parte del público debido a los dos años de ausencia. El cartel ha sido muy potente y la ocupación ha rozado el 100 por 100, exactamente un 98%”.
La encargada de poner el punto y final al festival era Nathy Peluso, quien reunió a 2.800 espectadores en el escenario flotante de Pirineos Sur. Su habitual intensidad y entrega hicieron que el público vibrase con sus canciones, y algunos de sus mayores éxitos como “Ateo” y “Mafiosa” retumbaron en la localidad oscense de Lanuza. La artista argentina ha irrumpido en los últimos años en el panorama musical internacional gracias a su estilo de ‘trap’, unido con otros ritmos como la salsa y el rythm and blues.
El festival ya prepara la edición del próximo año, más especial aún si cabe ya que será la 30ª edición de Pirineos Sur: “Ya estamos trabajando para que la próxima edición sea memorable. De hecho, ya tenemos cerrados artistas internacionales que nunca han pisado este escenario único y harán que el treinta aniversario de Pirineos Sur sea inolvidable y esté a la altura de su leyenda. Larga vida a Pirineos Sur y nos vemos el año que viene”, relataba Quimasó.
En portada: Pirineos Sur 2022, Nathy Peluso. Foto: Javier Ortiz