Por José Carlos de Santiago
Gonzalo Lebrija (1972) es considerado uno de los artistas mexicanos más sugerentes de las últimas décadas, precisamente las del boom de la nación azteca. Graduado de la especialidad de Ciencias de la comunicación en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente, desde pequeño sintió una singular inclinación por el arte, al que llega, según ha contado en varias ocasiones, por azar.
No muy lejos están los años en que, aun siendo estudiante universitario, hace su primera exhibición y pasa a formar parte de ese importante grupo de artistas de la década del 90 del pasado siglo que ha sido génesis de una interesante obra.
De Lebrija ya se dice que “ha dejado huella en el mundo artístico internacional” gracias a la forma en que trabajando desde varias disciplinas como la escultura, la instalación, el video y la fotografía, crea un lenguaje universal desde una visión con la que se expresa sobre cualquier cosa.
La Habana será dentro de uno días espacio para una de sus más recientes creaciones, tan reciente que todavía está un proceso. Se trata de la intervención Vía Láctea, que podrá ser disfrutada por los cubanos el seis de diciembre en el magnífico edificio que alberga al Museo Nacional de Bellas Artes.
Arte por Excelencias, desde Art Basel Miami, conversó con el artista mexicano -que expone con la Galería Travesía 4- a propósito de esta propuesta y algo más de su trabajo.
¿Por qué Cuba, qué te lleva a exponer allí?
Este es un proyecto muy específico que decidí hacer hace tiempo, tras una visita a Cuba. El origen está en la estrecha conexión que tengo con el mundo del tabaco, lo que voy a hacer en Bellas Artes va mucho con la idea del tabaco, con todo el imaginario que gira en torno a él.
Ya en concreto era una idea que venía pensando desde antes y que se pudo concretar gracias al Programa de Subvención a Artistas de The Shifting Foundation. Es con el apoyo de esta institución norteamericana que Vía Láctea será un hecho.
Vía láctea es una intervención de un día, todo sucederá el próximo seis de diciembre
¿Con quién trabajas en la Isla, que apoyo has tenido allá?
He tenido mucho apoyo por parte de los especialistas del Museo Nacional de Bellas Artes, y en especial de Carolina Barreto, una asistente muy profesional.
¿Cómo definirías tu trabajo si se tiene en cuenta la diversidad de elementos que te asisten a la hora de crear, materiales que empleas, etc.?
Mi arte corresponde a una generación de artistas que empezamos en los 90 y que somos multidisciplinarios. Yo trabajo con medios distintos, lo hago con fotografías, películas, con cine, con video, hago esculturas también. Ahora estoy haciendo una serie de pinturas, hago acciones.
Esta diversidad me permite hacer mucho, lograr hacer todo lo que imagino. Por ejemplo en la escultura trabajo con muchísimos tipos de materiales, de repente utilizo cerámica, pero también plomo, plata, acero; y gracias a eso puedo concebir en diferentes dimensiones, desde el pequeño formato hasta las grandes esculturas como la pública que de hierro hago para la ciudad de Guadalajara.
Vía Láctea, de Gonzalo Lebrija, llega a La Habana tras meses de intenso trabajo en los que el artista mexicano ha expuesto con éxito en importantes salas de Europa y Estados Unidos. Solo en los últimos meses su arte ha pasado bajo el titulo de diferentes muestras por las galerías Michael Fuchs, en Berlín, Alemania; Johannes Vogt, en Nueva York, Estado Unidos; La Casa Encendida, Madrid, España; Perrotin, París, Francia; y el Museo de Arte de Zapopan, Guadalajara, en su México natal.
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